Victoria por 2-1 del Athletic ante un RC Celta que mereció mucho más en San Mamés. Hasta la expulsión y penalti de Roncaglia el Athletic apenas generó peligro.
Primera parte con ocasiones muy claras para el RC Celta. Un tiro al palo tras vaselina de Aspas y un mano a mano de Guidetti ante Kepa pudieron significar el primer gol. Por parte del Athletic solo Aduriz con remates de cabeza pudo inquietar a Rubén Blanco. Un Athletic espeso ante un Celta muy bien plantado en San Mamés.
El segundo tiempo comenzaría con dominio y ocasiones por parte de los visitantes. Aspas driblaría a tres oponentes y su disparo de nuevo se marchó al poste de Kepa. Muy activo el delantero celeste en todo el encuentro. En una combinación por la otra banda, Guidetti sirve un buen balón para la carrera de Bongonda, que asiste a Aspas para que con gran clase marque ante Kepa. Primer gol merecido del partido. El Celta siguió dominando el encuentro ante un Athletic sin ideas y apagado, pero se encontró una y otra vez con Kepa, que estuvo espléndido en todo el partido. Cuando parecía que el Celta tenía el partido controlado, un penalti dudoso y una segunda amarilla rigurosa a Roncaglia desemboca en el primer gol del Athletic, obra de Aduriz de penalti. Los últimos minutos fueron para el Athletic jugando con uno más y asediando con la cabeza de Aduriz la meta viguesa. Tras tanto insistir, y con demasiada fortuna, en el 90 una dejada de Williams de cabeza sirve a San José para batir a Rubén Blanco con un potente disparo. Demasiado premio ante un buen Celta.
Lo mejor:
El muy buen partido del Celta pese al resultado. El centro del campo estuvo espléndido y Aspas de nuevo marca en esta Liga. En estado de gracia.
Lo peor:
Poca intensidad por parte del Athletic, que solo buscó el empate cuando se le puso de cara con el penalti. No dejó buenas sensaciones el conjunto vasco.
