Victoria del Atlético de Madrid en el Vicente Calderón ante el Eibar, que luchó hasta el final y le puso las cosas muy difíciles al equipo madrileño.
La primera parte fue mucho más táctica que técnica. El Eibar salió mejor plantado con la presión alta y pudo ponerse por delante con una gran maniobra de Inui, que acabó atrapando Jan Oblak. Pasado el cuarto de hora de encuentro, el Atleti le puso una marcha más y cambió el partido. A partir de este momento, el conjunto colchonero tendría las ocasiones más claras. En la primera, Carrasco sentó a Ramis y su tiro se fue alto en el mano a mano con Yoel. Asimismo, la más clara de la primera mitad fue para Saúl, que tras recibir un centro raso de un incisivo Thomas por el carril diestro, se le fue alto el disparo.
La segunda parte tuvo el mismo recorrido, pero con diferente resultado. El Eibar empezó más enchufado, con una ocasión de Pedro León que se fue por poco. Poco después, Carrasco lo intentaría una y otra vez pero no conseguía marcar. Una internada de Godín por banda izquierda daría la asistencia del único gol del encuentro, donde otra vez Saúl entraba desde segunda línea para romper el choque.
Lo mejor:
El experimento con Thomas en el lateral derecho ha sido un éxito. La polivalencia de los jugadores de los que dispone Simeone es brutal.
Lo peor:
Partido muy trabado, con pocas ideas y ocasiones.
