Sergio Canales ha atendido a Diario AS en la vuelta al trabajo grupal en el Betis. El centrocampista ha explicado cómo vivió el confinamiento y esa neumonía que le impidió volver antes a los terrenos de juego.
Enfermedad: «Es muy curioso, porque nunca me había puesto así enfermo de tener que parar, exceptuando claro las lesiones… Y me tocó precisamente ahora, después de dos meses en casa y justo antes de volver al césped. No tenía fiebre, era como un resfriado muy grande y el doctor me dijo que era una neumonía común de esta época, por culpa de tanto cambio de temperatura, del aire acondicionado. No paré de entrenarme y tenía que haberlo hecho. Pero ya está completamente olvidado y me encuentro a tope»
Situación: «Nunca en mi vida había estado tanto tiempo sin jugar con otros. Pero esta situación hará valorar a la gente muchas cosas. He trabajado conceptos psicológicos como la visualización. He notado mucho menos que en verano el paso al balón y al césped, y eso es porque me había hecho a la idea»
Recta final: «Yo entreno mucho en verano porque es buen momento para mejorar esas cosas que durante la temporada no puedes realmente, pero lo hago con otra mentalidad, no estás pensando en que cuando termines las vacaciones tienes que jugar des de ya. Durante este parón la cabeza se hace más fuerte porque piensas que luego se compite muy pronto y además en el momento más importante, esos 11 partidos que son la recta final. Creo que se puede ver todavía una mejor versión de Canales. Tengo llegada, por lo que debo mejorar de cara a gol. Es importante para mí e intentaré ayudar, porque los goles de segunda línea son cada vez más esenciales».
Joel: «El fútbol está muy expuesto. No sólo los jugadores, también los periodistas. Si hay dos o tres casos en el equipo sale un poco de lo cotidiano. Pero los tres compañeros lo veían supernormal. El fútbol genera estas cosas y que haya tanta repercusión nos ayuda en otros aspectos importantes. Con Joel hablaba mucho, se ha entrenado bastante en casa, me mandaba vídeos. Ha vuelto en forma y no le cuesta adaptarse».
