Tras la conclusión de la cesión del guardameta Andrés Fernández, la portería nazarí quedó huérfana. Tras recuperar a Oier y lograr la cesión de Ochoa, la meta ya tiene nuevo propietario.
El portero mexicano será el encargado de mantener la portería a cero durante esta temporada. Tras su paso por el América, Ajaccio francés y Málaga, Memo recala en el Granada con la intención de aportar experiencia y seguridad a la portería granadinista. Sin duda alguna, titular indiscutible.
El portero vasco no se ganó el cariño de los aficionados en su año como nazarí y los seguidores del Granada se lo recordaron cuando volvió a Los Cármenes como jugador de la Real Sociedad. En su primer año, sólo disputó 16 partidos en los que realizó demasiadas «cantadas». La temporada pasada jugó en el club Txuri-urdin en calidad de cedido. Este año desempeñará la función de segundo portero.
Uno de los jugadores más queridos por los granadinistas, y eso que sólo jugó 4 partidos durante la pasada campaña y realizando graves errores. Es el jugador que cualquier técnico quiere tener en su vestuario. Asume su rol como tercer portero y se dedica a hacer piña con sus compañeros, similar a la función que realizaba Pepe Reina en la selección española.