El RC Celta superó el primer asalto ante el Krasnodar en Balaídos tras imponerse por 2-1, con goles de Wass y Claudio Beauvue. Los vigueses jugaron un gran partido que dominaron prácticamente en su totalidad. El gol, en una de las pocas ocasiones del equipo ruso, deja la eliminatoria abierta.
Radoja: Dueño y señor del centro del campo del Celta, sea quién sea su acompañante. Robos, distribución y un repertorio técnico con los pies. Imprescindible a este nivel.
Fontás: Partido prácticamente impecable del central catalán. Berizzo apostó por él por su manejo en la salida del balón y cumplió con creces junto con Cabral. Serio, sin errores importantes y atento al corte. Una maravilla verlo de nuevo a este nivel.
Beauvue: Hambre, esfuerzo, vitalidad y un gol que sabe a gloria tras diez meses lesionado tras su grave lesión en el tendón de aquiles. Balaídos volvió a verle disfrutar unos minutos con la celeste y fue un único ser con la celebración del gol de cabeza. «Air Beauvue» ha vuelto para quedarse.
Cabral: Fue el más discreto de la zaga céltica. Muy blando en el gol en contra, que le penaliza demasiado. Cumplió sin embargo bastante bien durante todo el partido.
Guidetti: Dos ocasiones clarísimas de gol desperdiciadas que podrían haber puesto la eliminatoria completamente de cara. No completó un mal partido, pero se necesita más del carismático jugador sueco.