Croacia es la subcampeona del mundo, pero está lejos de ser una de las tres principales favoritas para conquistar la Eurocopa. El conjunto dirigido por Dalic lleva en plena transición, aunque con buena parte de los futbolistas que casi lograron besar la gloria en 2018. El combinado de los Balcanes llega algo más justo, con Modric sobrecargado por su exigente temporada en el Real Madrid y otros jugadores también muy justos de forma, como Vlasic.
El propio seleccionador lo explicaba ante los medios de comunicación: «Algunos jugadores llegaron con lesiones recién curadas y no jugaron en su club durante un tiempo. También me refiero a Vlasic. La situación es incómoda. No estamos todos al cien por cien, como sí estábamos hace tres años. Esto es evidente y debemos de hacerlo todo lo posible para superarlo. Necesitamos encontrar la manera de resolver esto. Cuando te sientes impotente, estás nervioso», decía para el medio ‘Sportske novosti’.
La aparición de Gvardiol
El joven lateral izquierdo debutó contra Bélgica. Nunca antes había tenido minutos con la selección absoluta, pero completó la segunda mitad del exigente encuentro ante los de Roberto Martínez. Cumplió y realizó unos muy buenos 45 minutos, hecho que ha provocado que la prensa y muchos aficionados pidan su titularidad (por delante de Barisic) en el debut ante Inglaterra.
Esto decía Dalic sobre la figura de Gvardiol, jugador del Dinamo de Zagreb: «Quería probarlo, acaba de llegar. Demostró que puede y está cerca de su primera alineación». Así, todo queda en el aire en ese costado izquierdo, igual que también hay dudas entre Vrsaljko y Juranovic en el derecho.