Jagoba Arrasate vuelve a optar por el 4-4-2 y recupera esa dupla de ataque formada por Budimir y Calleri. El técnico navarro ha tenido más fácil que casi nunca el once por las bajas de última hora de Roberto Torres, Oier Sanjurjo y Unai García. Cualquier duda que pudiera tener quedó disipada tras conocerse el contacto directo de estos tres jugadores con un positivo por Covid-19.
Había ciertas dudas en la banda que suele ocupar el ’10’ del conjunto pamplonica. Apuntaba al once el capitán, pero tendrá que dejar su sitio a Kike Barja. Ensayó con este último como lateral derecho el técnico, aunque no estaba demasiado claro que jugara en esa demarcación. Finalmente estará Nacho Vidal, habitual en el once, sobre todo desde la lesión de Roncaglia. En el costado opuesto veremos a Manu Sánchez y en el centro de la defensa seguirán los intocables David García y Aridane Hernández.
El resto del once lo completan Sergio Herrera en portería, fijo desde hace ya meses, más si cabe desde la lesión de Rubén Martínez. Monayola y Brasanac formarán el doble pivote. La ausencia de Oier dejaba el campo allanado a estos dos jugadores, aunque Torró parecía tener más opciones que Darko. Ambos contarán con el apoyo intermitente de un Rubén García escorado al flanco izquierdo.
Arrasate habla en la previa
«Es verdad que tiene el alta médica. Le ha venido muy bien esta semana. Físicamente está cada día mejor, le falta coger ritmo futbolístico. La rodilla está aguantando muy bien. Pronto puede estar, no sé si la semana que viene. Queremos que durante el parón pueda jugar un amistoso que le va a venir muy bien. Tenerlo sobre todo para los últimos 10 partidos. Está cerca de volver», comentaba el entrenador sobre el Chimy Ávila.
«Siempre hay que modificar cosas. En las dos últimas derrotas en El Sadar nosotros marcamos un listón y el rival fue superior. La idea es hacer un buen partido y mejorar cosas del último partido. Tenemos que hacernos fuertes en casa», indicaba acerca de los aspectos que tiene que cambiar el equipo.
