No hubo color en el Eibar – Espanyol que tuvo lugar en Ipurua. Bueno sí, el azulgrana de los locales. Desde los primeros compases marcó el ritmo de juego el conjunto de Mendilibar, que salió con la necesidad de puntuar y reencontrarse con la victoria. Todo lo contrario que el Espanyol, que parecía estar pensando ya en la Copa del Rey.
Las ocasiones se sucedieron y el Espanyol poco pudo hacer para frenar la avalancha local. Lluís y Naldo se mostraron muy inseguros, y Kike García y Sergi Enrich le buscaron las cosquillas constantemente. Tras fallar varias ocasiones claras, con un Diego López también inspirado, Enrich adelantó a los suyos tras un despiste perico.
Ya en la segunda mitad se estiró el equipo de Rubi, pero De Blasis, que cuajó una gran actuación, remató el partido. Lo hizo con temple, tras una gran jugada colectiva. Poco pudo hacer Diego López para evitar el 2-0 y tampoco el técnico perico, que movió el banquillo dando entrada a Mario Hermoso y Borja Iglesias para intentar voltear el partido. Para poco sirvió, ya que los locales se terminaron llevando el encuentro.
Naldo tuvo que marcharse lesionado del encuentro por problemas musculares.
Los protagonistas
MVP: Jordan (8)
Otro partidazo del centrocampista. Gobernó el encuentro desde la medular y guio a su equipo a la victoria. Se quedó sin marcar, pero no lo necesitó para marcar diferencias.
Destacado: Rubén Peña (8)
El lateral sigue de dulce. Se complementó bien con De Blasis y fue el puñal que nos tiene acostumbrado con sus incesantes subidas al ataque.
Revelación: De Blasis (7)
Era una de las sorpresas en el once de Mendilibar en lugar de Orellana. Y correspondió a la titularidad con mucha electricidad por la banda derecha y marcando diferencias. Además, encarriló el encuentro marcando el 2-0.
Decepción: Granero (4)
Prácticamente desaparecido en combate. Era uno de los encargados, con la ausencia de Darder, de mover al Espanyol. Pero nada de eso ocurrió.
Negativo: Naldo (3)
No tuvo su día el central perico. Casi regaló un gol a Sergi Enrich en la primera mitad y estuvo desafortunado e inseguro durante todo el choque. Finalmente se tuvo que marchar tocado.