Buenas noticias en la vuelta a los entrenamientos del FC Barcelona. Dembélé, lesionado de larga duración hace varios meses; Griezmann, que cayó en la recta final de Liga; y Lenglet, malherido tras el último encuentro frente al Deportivo Alavés, han pisado césped y han trabajado de forma individual.
Setién ha echado en falta únicamente a Araujo, que sufre un esguince en su tobillo derecho, y a Arthur Melo. El brasileño se ha declarado en rebeldía y se encuentra en su país natal de vacaciones. El conjunto catalán le abrirá un expediente disciplinario, pero de momento no parece tener mucha predisposición por volver.
El técnico tiene otro problema. Más allá del centro del campo, con Vidal y Busquets sancionados, Piqué es el único central disponible en estos momentos. Clement Lenglet y Ronald Araujo no tienen garantizada su presencia en el partido frente al Nápoles y Umtiti, con su maltrecha rodilla, no es una opción siquiera.
