Resuelta una de las incógnitas en Dinamarca de cara a los cuartos de final. Poulsen estará disponible para el encuentro frente a República Checa pese a ser baja ante Gales en los octavos. Aun así, el delantero no llegará en las mejores condiciones posibles porque su semana de entrenamientos ha sido complicada: estuvo al margen del grupo el miércoles y espera unirse este jueves para hacer parte de la sesión. El viernes, afirma, estará de forma plena con sus compañeros.
«Puede que no esté para jugar los 90 minutos, pero sí 60′, como contra Bélgica y Rusia. El personal médico me confirma que debería poder. Todavía tenemos algo de tiempo antes del partido, pero como se ve ahora, parece que puedo jugar durante un período más largo», confirma el jugador en unas declaraciones que podemos leer en ‘Ekstra Bladet’.
Y así explica sus molestias musculares: «Pude sentir algo en el muslo trasero en dos de los partidos de la fase de grupos, así que sabía que había algo y que, por el poco tiempo que hay ente los partidos, bien podría convertirse en un problema durante el torneo. Lo pude notar también cuando entrenamos antes del partido contra Gales; entonces supe que habría que tomar un descanso para poder participar en el resto de la competición. Fue una muy buena decisión y en un muy buen momento. Espero y creo que he tenido suficiente descanso para poder rendir al cien por cien el sábado».
Kjaer y Wass apuntan al once
El técnico pudo contar en la sesión del miércoles con Kjaer, que estuvo con sus compañeros durante buena parte de la mañana. El capitán se marchó antes de que terminara la jornada grupal para hacer ejercicios más específicos junto al propio Poulsen. Wass debe haberse recuperado de su enfermedad porque en la prensa local no hay mención alguna al jugador valencianista.
