El RCD Mallorca busca un guardameta con experiencia para ocupar el vacío que dejan Manolo Reina y Sergio Rico. Los bermellones tienen ya el perfil joven, que es Leo Román, pero necesitan a ese jugador llamado a ser titular durante toda la temporada. Encontrar estabilidad sería clave para un equipo que ha experimentado muchos vaivenes bajo palos, con hasta cuatro arqueros diferentes en una misma temporada.
Según ha informado AS, tanto Sergio Asenjo como Fernando Pacheco son dos de las opciones que contempla la dirección deportiva. El primero ha terminado contrato con el Villarreal y el segundo viene de bajar a LaLiga Smartbank. El Deportivo Alavés está dispuesto a escuchar ofertas por el portero, que seguramente vea con buenos ojos seguir en la máxima categoría del fútbol nacional, sobre todo si es para ser un fijo.
Lo de Asenjo y el Mallorca también resulta razonable porque llegaría libre y cumple los requisitos del cuadro insular, pero lo cierto es que ha sido vinculado al Real Valladolid, donde ya militó hace años. Ese factor sentimental puede declinar la balanza hacia el conjunto blanquivioleta. Ambas propuestas parecen interesantes para el ex de Atlético de Madrid o Málaga, que ha perdido la titularidad durante este último curso y tratará de recuperarla en su nuevo equipo.
Muriqi lo tiene claro
Vedat Muriqi fue el gran fichaje del mercado invernal en clave RCD Mallorca. Sus goles sirvieron para impulsar a un equipo que tenía muchísimas dificultades para ver portería. El kosovar ofreció rendimiento inmediato y también aportó mucho en eso que dicen de los intangibles. Fue una pieza clave para Luis García Plaza y mantuvo ese rol principal con Javier Aguirre.
Tal y como cuenta MARCA, Muriqi quiere seguir en la isla. Sabe que es importante y LaLiga Santander es una competición muy llamativa. Algo influirá también la calidad de vida de un entorno como Mallorca. En definitiva, muchos alicientes para el atacante, cuyos derechos pertenecen a la Lazio. El club italiano parece dispuesto a negociar y las negociaciones, en principio, deben llegar a buen puerto.