Quizás haya dejado de ser noticia que Griezmann podría quedarse en el banquillo. El francés ha sido suplente en varios partidos de Liga durante el tramo final del campeonato. Setién ha demostrado cierta personalidad y ha prescindido de él cuando lo ha visto necesario.
Eso fue lo que pasó, por ejemplo, frente al Sevilla. Era el partido más difícil de todos, además del encuentro ante el Atleti. El cántabro dejó al francés sin ser de la partida en ambos. Minutos residuales frente a los madrileños y algo más en Nervión. Insuficiente.
Y ahora llega la cita más importante del curso contra el peor rival posible. El todopoderoso Bayern de Munich espera. El Barça se encomienda a Leo Messi, pero diez más acompañarán al argentino. ¿Estará el galo?
Los precedentes hacen pensar que no. El choque ante el Villarreal fue un halo de luz entre tanta oscuridad. También insuficiente. Ha resultado ser un espejismo. El ex del Atlético de Madrid estuvo desaparecido ante los italianos. Y, sorpresa, volvió a ser sustuido.
El posible once del Barça es el siguiente: Ter Stegen; Jordi Alba, Piqué, Lenglet, Semedo; Busquets, Arturo Vidal, De Jong, Sergi Roberto; Suárez y Messi. No, no está Griezmann. Quizás el técnico le dé la última oportunidad. Parece que no será así.