El Sevilla rompe la imbatibilidad de Las Palmas en su estadio y se lleva a casa 3 puntos vitales.
Ambos equipos salieron fríos al Estadio de Gran Canaria y las pérdidas de balón fueron constantes al inicio. Una vez fueron pasando los minutos la esperada lucha por la posesión se hizo evidente. El dominio fue cambiando de color, del amarillo al rojo y del rojo al amarillo, para llegar al descanso al 50%. ¿Oportunidades? Pocas, una clara por cada equipo, en las que Jesé y Franco Vázquez se toparon con los porteros.
En los segundos 45 minutos, los locales salieron más dominadores y metieron al Sevilla en su área. Sólo Rico pudo evitar el 1-0 con dos grandes paradas a David Simón y Boateng. Pero entonces, apareció la magia de Sampaoli. Por sorpresa, sacó del campo a un N’Zonzi fallón y dio entrada a Iborra, que se convirtió en el hombre más destacado del partido. Más tarde, con un doble cambio volvió a refrescar a su equipo y a los pocos minutos, llegó la recompensa. Iborra peinaba un saque en largo de Rico y Correa, recién entrado al campo, aprovechaba su velocidad para batir a Varas.
Los recursos de Sampaoli. Con sus cambios ha cambiado el encuentro y se ha llevado 3 puntos ante un equipo invicto en casa.
Un partido algo decepcionante. Se esperaban dos equipos con más desparpajo en el ataque.