Huesca y Real Valladolid iniciaban la jornada 22 de LaLiga Santander. Un partido de urgencias para los aragoneses debido a ser los colistas de la división y ante uno de sus rivales directos por la permanencia.
El partido comenzaba con los dos conjuntos tirados al ataque. Alcaraz tendría la primera gran ocasión del encuentro con un cabezazo que despejó Santamaría. El Huesca no se quedaría atrás y Gallego también cabecearía un centro del Cucho pero Masip realizaba una enorme parada. En el 18′, Gallego no perdonaría un error en la defensa vallisoletana y pondría el 1-0. El encuentro se calmaría hasta llegar al descanso con ventaja para los oscenses-
En la segunda parte, Pulido aumentaría la ventaja para los azulgranas gracias a un cabezazo al que no pudo llegar el meta castellano. Pero la pesadilla para los albivioletas iría en aumento, Moi Gómez haría el 3-0 tras varias indecisiones en la zaga de los vallisoletanos. El ‘Chimy’ Ávila aumentaría la sangría, al ganar la espalda a toda la defensa rival y marcar en el uno contra uno ante Masip. Un Valladolid, anestesiado por los golpes, intentaba sacar un poco de orgullo en El Alcoraz pero sin ningún tipo de éxito. Al final, los aragoneses se llevaron los tres puntos en su mejor partido de la temporada.
Su primera parte debería enseñarse en las escuelas de fútbol. Gran juego aéreo, de espaldas, definición en el gol… Este encuentro puede marcar su ascenso en los fantasy.
Correcto en defensa y encima ha marcado el 2-0. En Anoeta, ya dio síntomas de mejoría y hoy lo ha confirmado.
Uno de los culpables de esta resurrección del Huesca. Mantuvo el control en la media y supo meter velocidad a los ataques cuando debía. Este jugador va a dar más de una alegría en los fantasy.
Lleva un mes desaparecido. El murciano ya no consigue desbordar a la defensa rival ni tiene la influencia que tenía en el ataque del conjunto de Sergio González.
Irreconocible. Una sombra del futbolista que encandiló a todo el mundo fantasy en la primera vuelta. Falta de contundencia y fallos garrafales que no son normales en el defensa de los blanquivioletas.